Aforo completo en la 2ª jornada del Congreso Internacional de Seguridad ECOS

 

Ante un aforo completo, nuestro decano José Augusto Suárez presentó la segunda jornada enmarcada en el Congreso Internacional de Seguridad ECOS, especialmente enfocada a las fuerzas de intervención en caso de rescate.

La primera parte de dicha jornada se abrió con ambas ponencias a cargo de REPSOL, que hablaron de los espacios confinados en general en la industria del petróleo, y en particular en la Plataforma Casablanca, con las intervenciones de Mariali Faverola Aponte y Manuel González Álvarez respectivamente.

 

 

El segundo bloque de ponencias de la mañana estuvo protagonizado por los cuerpos y fuerzas de rescate. En su presentación, nuestro decano señaló que “como denominador común de todos ellos podríamos atribuirles tanto la profesionalidad, el sacrificio, la valentía y sobre todo la disciplina, pues son atributos que ejercen en su labor diaria”.

Como representantes de cada uno de ellos figuraron como ponentes Antonio Ortega Escalada, jefe de la Brigada Central de Salvamento Minero; José Javier Pascual Fernández, de la Unidad Militar de Emergencias; y Pablo Villabrille Sampedro, de Grupos de Rescate Especial de Intervención de Montaña de la Guardia Civil.

El jefe de la Brigada, Antonio Ortega Escalada, inició su intervención con esperanza y miras al futuro. “Mi intención es la de explicar, sobre todo a las personas que no conocen nuestra historia, qué hacemos y a qué nos dedicamos. Que salga a la luz nuestro trabajo, porque tanto en la minería como en otros sectores industriales de Asturias es importante buscar una alternativa; y espero que a raíz de darnos a conocer a los demás sectores aparte de la minería, tengamos un futuro”.

“Somos un cuerpo de rescate formado por mineros altamente cualificados con una experiencia mínima de 10 años en minería de interior. Preparados para dar cobertura durante las 24 horas del día, los 365 al año”, introdujo.

 

 

Respecto a los orígenes, el jefe de la Brigada señaló que “debemos retroceder al siglo XIX, en el que ninguna empresa se preocupaba por formar y preparar a sus trabajadores para, en caso de tener un accidente, dichos trabajadores supieran actuar de una forma que no comprometiera ni su seguridad ni la de sus compañeros”.  Fue en 1912, cuando Duro Felguera fundó la Brigada de Salvamento Minero, y en 1920 nació la ASM, Brigada común para las hulleras de las cuencas.

Actualmente, la Brigada ofrece actuación de emergencia como brigada de 1ª o 2ª intervención en obras subterráneas y otras instalaciones: espacios confinados, atmósferas irrespirables o explosivas durante largos periodos, hundimiento de galerías y derrumbes, trabajos en altura. Además de realización de simulacros, plan de emergencia, plan de evacuación, inspecciones de instalaciones (galerías, tuberías de gran diámetro, colectores, etc.). Todas estas acciones se amplían con formación y entrenamiento personal de 1ª intervención en las técnicas anteriormente citadas, formación en atmósferas irrespirables, de uso de equipos de respiración autónoma, de extinción de incendios y de técnicas mineras de sostenimiento.

Al mismo tiempo tiene firmados convenios y colaboraciones con Unidad Militar de Emergencias,  Policía Nacional – TEDAX, Protección Civil, Grupo de Rescate Especial de Intervención de Montaña, cuerpo de bomberos de Israel, Madrid, Portugal, Boltzano, Barcelona y Servicio de Emergencias del Principado de Asturias, entre otros.

Hasta el año 2000 la BCSM ha realizado más de 400 intervenciones. La más destacable en Asturias, por el número de víctimas, fue la realizada el 31 de agosto de 1995 en el Pozo San Nicolás, en la cual perdieron la vida 14 mineros. Antonio Ortega Escalada también destacó la de la Central Térmica de La Pereda, la del Pozo Sotón en noviembre de 2019 y Totalán en enero de 2019.

Esta última intervención afirma, “fue una que nunca voy a olvidar, no por la actuación en sí ni por la dificultad de las labores a desarrollar, sino porque era mi primera intervención, y porque tuvo lugar fuera del ámbito de la minería, había una gran expectación tanto por los medios como por la gente en general  y por la cantidad de cuerpos de rescate con los que se convivió”.

La jornada de la mañana finalizó con una mesa-debate moderada por nuestro decano con una alta participación por parte de los presentes que realizaron preguntas y reflexiones ante los representantes de los cuerpos de rescate.